El pasado jueves estuve en el colegio Calderón de la Barca (Madrid) realizando varias charlas relacionadas con los «Cuentos para entender el mundo», la verdad es que fue una mañana genial en la que la participación de todos los alumnos fue estupenda.

Comentamos las moralejas de varios cuentos y me hicieron preguntas de todo tipo, pero si hubo algo que me sorprendió gratamente es que, cuando estábamos acabando una de las charlas, sonó el timbre del recreo y nadie quería salir, de hecho nos quedamos un rato más comentando varios temas, ¡increíble!